jueves, 10 de febrero de 2011

EL GOLPE, de George Roy Hill

Tres timadores de medio pelo, después de engañar a un incauto con el truco del "cambiazo",se dan cuenta de que el tipo iba más forrado de lo normal. Tras la alegría inicial por el abultado botín, llega el miedo. Y no es para menos, pues el timado resulta ser un correo de Doyle Lonnegan, uno de los mafiosos más temidos de la ciudad. El mayor de ellos, el entrañable Luther, es asesinado por venganza a manos de los hombres de Lonnegan. Y así es como su compañero Hooker (Robert Redford) se embarca en la peligrosa aventura de vengar  a Luther timando al propio Lonnegan. Una locura que aprentemente sólo puede tener visos de éxito si cuenta con la ayuda de Henry Gondorff (Paul Newman)...
Así arranca El Golpe, filme ambientado en los años 30 y dirigido en 1973 por George Roy Hill y que hasta la fecha permanece como la película de timos por antonomasia. Un guión perfecto, sin fisuras (aunque con alguna que otra licencia), para un entretenimiento en estado puro.
Siempre que la veo la disfruto y me fijo en nuevos detalles, y albergo una sana envidia hacia los que la ven por primera vez y se van asonbrando e intrigando a lo largo de la película con la preparación del golpe, los avatares de los protagonistas y sus ingeniosos trucos.
La escena de la partida de poker en el tren, con Paul Newman haciéndose el borracho, pero bien sobrio y haciendo trampas mejor que Lonnegan, mientras éste pierde los nervios poco a poco, es antológica.
Y cuando Kid Twist (encarnado por Harold Gould, que siguió después con los timos en la serie de TV "Palo y astilla") se hace pasar por corredor de apuestas utilizando un despacho que no es suyo, al que entra haciéndose pasar por pintor en el momento oportuno y desalojando al verdadero ocupante,es de esas que han creado escuela, y siempre que la veo me queda una sonrisa que tarda en borrarse.

La amistad y el compañerismo entre los dos protagonistas(a los que ya George Roy Hill había dirigido en "Dos hombres y un destino") recorre todo el filme y es una de sus más importantes bazas.

Como era moda en los años 70, no podía faltar una persecución, en este caso portagonizada por Hooker huyendo del teniente de policía Snyder, en un tono bastante desenfadado.
Y sobre todo ello, la genial banda sonora, compuesta casi integramente por ragtimes de Scott Joplin acertadamente arreglados por Marvin Hamlisch. Este filme consiguió que a partir de entonces el rag "The entertainer" se asocie indisolublemente al poker, la cartomagia o los juegos de azar en general.

8 comentarios:

  1. Maravillosa. A ver si la veo con mi hijo este fin de semana. Alguien se la ha recomendado. Él también se ríe de mi cuando digo: "para ver este peliculón hay que ponerse de rodillas".

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  2. Bienvenido, Jesús.Que disfrutes viendo la peli y la cara de tu hijo :)

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  3. Peliculón, si señor. Desenlace de los que hacen afición. Im-pres-cin-di-ble.

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  4. Que decir de el golpe, en mis tiempos me la sabía de memoria.

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  5. Recuerdo en especial la escena de la partida de poker del tren, en la que el personaje de Poul Newman consigue cabrear de los lindo al ganster Lonegan a base de hacer mejores trampas que el y de equivocar deliberadamente su nombre en repetidas ocasiones.
    Aquí demuestra Poul Newman su gran capacidad cómica, algo que solo saben hacer los mejores actores.

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  6. Bueno, Paul, no Poul

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  7. Bienvenido, Oscar, en este blog no podían faltar tus comentarios.Totalmente de acuerdo con lo que dices de Paul Newma y su vis cómica.El humor, en efecto, está muy presente en la peli.
    "Luther no me dijo que fueras un bocazas" " Ni a mí que tú fueras un mamarracho".
    Un abrazo

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  8. Je, je, ... esto siempre me provoca una carcajada. Me encanta la palabra mamarracho....

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